Siempre junto a ti un día tu me dijiste

martes, 22 de febrero de 2011

Resistir


No ha regresado. Lo sabía, esta resistiendo. Él es así. No creo que vuelva. Por un instante me gustaría llamarlo y decirle algo, y hacerle sentir que, en cualquier caso, lamento lo que ha ocurrido. Sólo que hay momentos en los que es necesario resistir el deseo de hacer una llamada, porque quizá uno está enfadado y necesita estar solo, no hablar con nadie, ni siquiera con las personas que le quieren. Abro el libro de los oráculos y le preguntó lo que deseo saber con todas mis fuerzas. Lo levanto para leer bien y.. "Hay cosas que es preferible que sucedan". Cuando leo la frase me siento morir. No me lo puedo creer. No es posible. No. No volverá. Y casi me entran ganas de echarme a llorar. Al cabo de un momento, las lágrimas resbalan por mis mejillas y de repente me siento sola, sin la seguridad que sólo él sabía darme. Y sigo llorando. Me gustaría poder contarle a alguien todas las cosas que en ese momento me pasan por la cabeza, pero no sé a quién dirigirme. O quizás me gustaría que entrará de improviso y me dijera: "Venga, no llores. Todo ha sido una broma" Pero no es así.

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