Te ofrezco éste sacrificio de no tenerte, de no verte, de decidir por los dos. Te ofrezco mi alma cansada de cansarte, mi voz en quiebra de tanto delirio, mis manos vacías de tus proyectos, llenas de ilusiones perdidas, desgastadas. Te ofrezco mi vida partida, mi mirada rota de tanto dolor... Casi esperando el milagro de que todo cambie terminamos cambiando los dos.
Me olvidé de decirte amor, que sólo traté de amarte mejor.
Te ofrezco la tortura de imaginarte aferrado a otro cuerpo
dejando atrás las veces que te dí mi alma envuelta con mi cuerpo, mi calor abrigándote de cualquier dolor. Mi corazón como ofrenda a tu amor... Te ofrezco ésta soledad repleta de tu recuerdo constante. Mi paz en plena guerra con tu olvido, mi vida amenazada de un futuro que no puedo siquiera imaginar sin tu amor. Pero te ofrezco éste final insegura decisión, para que seas feliz de otra manera que no pude hacer yo. Te ofrezco cada día que recuerde.. no olvidarme de vos.
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